Infinite

Anti-listado 2012: dónde están las escritoras

Como todos los finales de año, llega la hora de hacer listas con lo mejor de. No podía faltar, entre tanto ruido, los libros de 2012. Una lista imposible que voy a ahorraros, porque he leído lo que me ha dado la gana en cada momento y no las novedades, culpa de un bolsillo muy ajustado. Por contra, vengo a hacer una suerte de anti-listado furibundo del hecho en sí de las listas fin de año, que otra vez (366 días mediante, encima uno más) exhiben el mismo error que se repite, y se repite, y se repite... y no pasa nada, se mira hacia otro lado con supuesta vergüenza culpable. Lo siento mucho; me he equivocado y no volverá a ocurrir. Pero ocurre, al año siguiente.

No queréis ser como K, no

Las aguas han vuelto a su cauce, nadie se acuerda ya de mencionar a Kafka. A excepción de los que se hayan enganchado al apartado cultural Diario Kafka, que deben soportar el logotipo del checo pasado por amarillo, y alguna que otra cita, que el community manager comparte en Twitter de vez en cuando para animar a la lectura.

Le dream - ¿Proyectos? - Ayúdame, maya

Le dio al chico un fuerte coscorrón en la cabeza.
- Tú piensas que tus sueños existen aquí, dentro. Pero yo me encuentro a mí mismo en todas partes, así que, ¿quién sabe qué parte de mí está soñando con otra parte?

Curry, jengibre y anís

Por las mañanas pido siempre un café para llevar, en uno de estos vasos de plástico con tapa. Me dan también un sobre, con poco azúcar y un palo blanco que sirve de cuchara-removedor.

El líquido que llaman café está malo malísimo, pero lo sigo pidiendo todos los días, a veces sin abrir la boca porque ya lo tienen preparado en la barra cuando me ven entrar.

El 'establishment' hipócrita

Otro granito de arena más, pequeño y ridículo. Estaba aquí sentada en la oficina, cuando empecé a escribir este post. No es mala idea eso de que el Fin del Mundo sea mañana, por qué no. Decido aprovechar estos minutos en rebeldía.

Estaba aquí sentada, como digo, sin hacer nada. Porque se supone que es un trabajo lo que escribo en el ordenador, pero no pagan (día 20 de mes, ojo, y era el 5). Así que gasto el tiempo en escribir en el blog, que tampoco pagan, a menos que pinchéis por caridad en los anuncios Adsense que he puesto por ahí...

Vueltas y vueltas


Diría que el Periodismo es una mierda, así en general. O también podría decir que la casta empresarial sigue anclada en tiempos del Lazarillo de Tormes, y los empresarios siguen pensando que, pobrecitos, ellos ocupan esa desfavorable condición de Lazarillo muerto de hambre y deben emplear toda la picaresca a su alcance para sobrevivir. 

A costa de lo que sea.

Un relato de domingo

[1]

Los reporteros han recogido sus cacharros y ya se han largado. Vuelvo al cuarto para observar la estantería. Es un auténtico asombro, cómo he podido escribir tanto, les decía a cámara. La frase me araña de sorpresa al pronunciarla, la frase tiembla en mis ojos ahora que estoy completamente a solas.

Premios libros y literatura 2012

Pues eso. Que un día festivo lo tiene cualquiera. Y con más curiosidad que posibilidades, me presento a este concurso navideño, a ver qué pasa. Los organizadores, Libros y Literatura, le dan la utilidad de promover los blogs literarios (que no me resulta interesante, porque insisten en que los de reseñas son los literarios). Lo otro sí que es más interesante y útil, un par de eReaders y un montón de libros de regalo. Eso ya está mejor.

Una de generaciones que lloran mucho


Tan bonito y limpio el ensayo de Meredith Haaf sobre la Generación Perdida. Supongo, no me lo he leído. Estoy de generaciones (literarias y demográficas) hasta el mismísimo.

Tampoco creo que vaya a léermelo. Las reseñas son suficientes para entender que la chica de Múnich va a contarme otra milonga, la misma realidad edulcorada que sale en los medios españoles, entre las líneas de opinadores que son muy felices porque, claro, escriben porque les pagan o algo parecido.

Kosmaro


Incapable de nostalgie
J' envie le calme des vieillards
La petite mort dans leurs regards,
Leur air en deçà de la vie.

Vibrato

Frío hielo. Hielo simétrico. El blanco es la suma de colores y queda en nada.

Pequeña Lamb

Tengo un frío incierto recorriéndome la espalda
hasta abajo, tiritando.
Hace humedad y fuera llueve pero no es eso.

Ya está todo perdido. Total, ¿qué?


"No podéis amar la verdad y al mundo. Pero vosotros ya elegisteis. Ahora el problema consiste en ser fieles a la elección. Os invito a conservar el ánimo. No porque podáis esperar algo. Al contrario, sabed que estaréis muy solos. La mayoría de la gente se reconcilia con la vida, o bien se muere. Vosotros sois suicidas vivientes". 
 (M. H.)

Bailoteo existencial


Gabriella Camerotti
Con la de cosas que hay por contar, en estos momentos, y estoy aquí, bailando. Como lo leen. Me ha dado por bailar, a mi edad, a ver si recordaba la quinta posición. Y la recuerdo y las piernas todavía las levanto por encima del hombro, a pesar del culo un poco más gordo.

El mes empezó raro y raro sigue; sangriento, truculento.

Hay tantas cosas raras que contar y aquí danzando. Hace tres años y medio que no me resfriaba ni un poquito. Ahora que lo hago, en vez de fiebre tengo ganas de bailar.

Noviembre oscuro

Este mes no podría haber empezado de otra manera más delirante y desastrosa. La pesadilla relatada en el post anterior fue nada más que el prólogo.

En la madrugada siguiente, la tragedia del Madrid Arena. Pero no quiero hacer comentarios de ese horror. Como responsable de la actualización del diario digital donde estoy, no me ha quedado más remedio que revisar todas las fotos, fototuits, visionar todos los vídeos, pedir permiso a los autores, estar pendiente de las declaraciones de los responsables, de los testigos, minuto a minuto, durante varios días. Y lo que queda aún. Fuerza a las familias.


Al otro lado

Un vecino (inexistente en la realidad) golpeaba con saña la puerta de casa, queriendo echarla abajo para entrar. De los puñetazos pasó a lo que sonaban como golpes enfurecidos con el hombro.

Mi angustia aumentaba mientras sujetaba una jarra blanca de esas metálicas, como de cuarto de baño antiguo. Era por la tarde, bien tarde, pero todo estaba oscuro azulado por las persianas bajadas, no sé por qué.

Steak tartar con salsa tártara

Lo sabéis.
Lo sé yo.
Haré como si alguien lo supiera, qué mas da.
Casi una semana sin un post, significa que algo malo debo estar haciendo o leyendo. Sí, siempre.

Das Grab (parte III alternativa)

*Das Grab , versión alternativa de La doble barrera III (J. H. IV)
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El bicho rojo

No querrías estar en su pellejo. No, no querrías, de verdad que no.
No te gustaría cambiar de sitio.

Do you need so...?

15 
Qué hará ése en medio del campo,
escribiendo en medio del campo,
que ha parado su coche
y se ha puesto a escribir.
Ése, que a lo mejor soy yo,
a lo mejor trataba
de contar el sentimiento
de esta tarde tan bella.
Como se sabe, inútilmente.
Olvidos
José Antonio Muñoz Rojas


33 No-Mártir

La cara de mirar al infinito ha sido hoy bastante importante cuando me he sentado, por fin, en el escritorio. Lo sé porque, después de unos minutos, me pinchaba la mandíbula debido al gesto inconsciente de oh, díos mío de-mi-vida-y-de-mi-corasao, pero esto qué cojones es. Nada de WTF! no, no, la frase en castellano, repetida en bucle.

Colección de vida


Dicen que el poeta cubano José Martí es el autor de esa frase vital tan gastada, un hombre para ser completo ha de plantar un árbol, tener un hijo y escribir un libro. Y aunque es la opinión mayoritaria, no me queda más remedio que añadir: otras fuentes dicen que es una enseñanza extraída de un relato de Mujámmad (alabado sea el profeta, no me queméis el blog).

Como sea, y prefiero la versión de Martí, es la típica frase del acervo popular repetida mil veces sin que sirva para nada.


Los días en la isla

Cuando nadie me mira, enseño las heridas que tienen sangre y costra a la vez, pican porque están curando.

Odiar por momentos

 State  of Emergency. Steven Meisel (2006)
Una sección completa, subperiódico de un periódico, se está conviertiendo en el depósito de todas las náuseas que caben en mi cabeza. Las náuseas en el estómago, figuradas o reales, tienen solución. Las del cerebro, no.

Reentrada a qué

Ya ha llegado septiembre, sí, como se repite en todos los espacios comunes. Leer una y otra vez la cantinela de la vuelta a: las publicaciones vuelven a publicar, los bloggers a bloguear, las vacaciones finalizan y te puede dar un síndrome de no sé qué por el regreso a la vida cotidiana.

La niña y la ciudad

by Evan Kafka
Pasar la noche en una tras otra hora, sin que de tiempo apenas al gorgoteo del café: no hay tiempo. Ni cansancio. La calculadora encaja la estantería brillante y el recibidor con el gran espejo. La alfombra luminosa arrastra el mismo polvo que he visto en el parque.

Principios conjugacionales de un relato-vida

Tenía unos 7 años y era una mañana de domingo, soleada y sin tareas pendientes, más o menos como la del pasado 26.  Observé la estantería del salón con curiosidad ociosa, porque no tenía ganas de poner la televisión. Saqué un libro al azar, La metamorfosis (y otros relatos) - Franz Kafka. Me dio bastante risa cuando empecé a imaginar la situación de un hombre (adulto) convertido en un bicho que, por la vaga descripción, parecía un escarabajo pelotero moteado. 

A las vueltas girar

A los 20 años (19, 23) todas las poetas nos parecemos.

Tenemos el pelo largo y teñimos los labios de rojo. 

La doble barrera III (J.H. IV)

Un punzante sonido se abre paso entre las sienes a la hora de siempre, pero ya no hay nada parecido a lo de ayer. Le sigue un estruendo deliberado, un aviso terrible, cuidado, es la alarma antiaérea. Bombardead todo, por favor. No quiero despertar. Ahora no, hoy no.

Yanga-lore: te voy a gastar el nombre


Aquí hace frío, pero es agosto. Llueve en pleno verano. No hace frío en realidad, es mi piel erizada. Abro las páginas y estalla una alarma de coche en la ciudad dormida. Puta sincronía, qué susto.

El negro es el color de la renuncia y mi pelo está teñido reciente de negro. Y de punta.

Ahora hace calor. Se fue la tormenta de verano y el aire es una brisa caliente, enseño los dedos de los pies y vuela el algodón teñido de colores en la India.

La doble barrera II (John Hawkes III)

Anotaciones para quien lo lea ahora, por ejemplo Juan (Cruz López):
El experimento sigue, con más retraso de lo habitual. Esta pausa es, sin embargo, puro fraude. Puede que este trozo no continúe nada; todavía no he sido capaz de leer la parte uno. Sé que hay olor a lejía, por una lectura oblicua de la primera frase. También he leído la última, porque coronaba el principio de una hoja en blanco en el documento original. Del resto, no tengo ni puñetera idea. Incluso he cambiado Gerttra, por Gerta o Gertta, usando CTRL+F para no tener que revisar nada. Así se ha escrito la parte 2, a ciegas. Cagada. (Pero me divierto bastante)

Los perros

El mundo emocional de las altas esferas mentales

Sobre dibujo original de Khiel
Empecé a llorar cuando todavía no se habían inventado las lágrimas. Ya entonces, crecían bien adentro. El sentimiento del funeral perpetuo, sin descanso ni requiescat, sin alma del gozo. Tan lejana de aquella postal de los querubines dorados.

¡C'est fini!

Son horas nada más que para sentarse en la hierba, a descansar de tantas putas malas. Esas de la gonorrea y la sífilis y el hambre, las que nunca tendrán cuerpos esculturales de silicona ni apartamentos privados.

Sobran las pulgas y necesito un baño con el jabón de los perros. Tengo una herida que puede producir la muerte, mañana habrá que disimularla para trabajar.

Esta noche, descanso.


No me he ido: morir de a poco

Fotografía levemente censurada por si tenéis estómago débil
Mirad, hasta he encontrado al motorista. O ciclista.

Estas cosas no me gustan: coger carrerilla de 2 posts (1 oculto) y no llegar a tiempo ni para encender el ordenador.

Irritada, acabé en la librería, ahora o nunca.

La doble barrera (John Hawkes II)

Anodino, difuminado y simple. Ha costado verdaderos esfuerzos encontrar más información sobre John Hawkes (el novelista) porque todo lo ocupa John Hawkes (el actor). Del Hawkes de carne y hueso. Profesor universitario durante décadas y asmático. Y poco más. Por fin un loco normal, POR FIN. Ni cuernos, ni puteríos, ni sífilis, ni alcoholismo, alucinógenos o suicidio. Quizás era muy discreto para esas cosas o que no hubo nada de eso. Creo que la solución es muy sencilla,  todos los niños con problemas crónicos de pulmón acabamos con una imaginación suprahumana; al fin y al cabo, ¿no era que los yonkis también utilizaban los jarabes para la tos? Así empiezan las pesadillas. Es una teoría personal.

Creative Hawkes - Preview

Y loco Hawkes.
Podría haber pasando por alto esta edición reciente de El Caníbal de John Hawkes (marzo 2012) en  Libros del Silencio.

Ignorando como una ciega a Blumm y a JAB, como hice en su día, recién publicado. Cuando se dice que un libro "es difícil" saltan todas las alarmas, porque siempre acaba en tremenda hostia lectora del quince, ¿y eso era todo?

Noche de la libreta distante


El verano nunca será el mismo.

Ya no es lo mismo.

El aire tibio sigue permitiendo ver la luz dorada hasta las diez de la noche, en una noche-tarde que no pertenece a ningún mundo. A esa hora, el salitre debe ser el olor del cielo. De día, el sol sigue poniendo la piel color café doble. Los lunares siguen apareciendo, color café con hielo.

Leer con música



Mentalidad de garrulos y a seguir timando


Rajoy anuncia en estos instantes los recortes y la subida del IVA genral al 21%. Al mismo tiempo, estoy redactando estas líneas, tengo otras 15 pestañas abiertas en el navegador con páginas de empleo, páginas propias de empresas, callejeros, servicios de consulta jurídico-laboral y oficinas virtuales del ayuntamiento. Y tomo café. Y maldigo en arameo gitano.


Todo junto, ya ven, multifuncionalidad extrema.

Riau riau pum

Mi primer San Fermín no lo recuerdo demasiado bien, para qué nos vamos a engañar: contaba con cuatro meses de vida, reales. Es decir, un embrión de cuatro meses. Pero la memoria fáctica no ha sido impedimento para que, año tras año, y porque sí, me levante el 6 de julio canturreando por lo bajini lo correspondiente. Es otra manía indescifrable de origen incierto, sistemática y perpetuada durante décadas, independiente al hecho de ver o no el chupinazo por la tv.

Perder el mechero y las alergias


Perder el mechero a las tantas de la noche era un favor, hace no tanto. De aquella época en que fumábamos dentro de los bares. La falta de nicotina duraba lo justo para elegir adecuadamente una víctima del retórico ¿Tienes fuego? y posterior conversación. Cuántas así.

Las reglas han cambiado

El vértigo no es cosa mía ni en lo alto del Dragon Khan. Quizás una sensación de aceleramiento en el estómago, subir-bajar, la gravedad maldita a 9.81 m/s². Esa velocidad toma impulso con el choque de dos pulsiones que se muerden en la boca. Visualiza dos dragones estilo chino, gigantescos, a dentelladas y guantazos.

Doble mitad


El dibujo, realizado sin prestar interés a la calidad artística, da un poco de miedo. No es que la foto sea muy mala, es que además el resultado es así de feo.

Uno de esos rostros estándar que pinto cuando me aburro o hablo mucho rato por teléfono o sólo quiero practicar con el trazado de caras. 

Cumbres del Nanga Parbat, la noche de azul


- ¿Hueles eso?
- ¿A porro?
- No, idiota, esa colonia.
- No huelo a nada en realidad.

Mísery, con tilde en la i de idiotas

Esto no es una queja quejicosa, es un grito de guerra. Porque estoy divinamente harta de tantas estupideces. Que vale que el mundo actual no tiene sentido, pero...
 

El clímax de teclarrea se ha visto cortado estos tres días por estar a prueba en un empleo hostelero. No quise decir nada por la antiquísima superstición de que se jodiera el asunto. Según me comunicaron esta tarde no hay permanencia, así que reescribo este post dejado a medias.

El factor disidente o distante


Llegar aquí, con el pelo ya rozando las pestañas y pasando los hombros. Por fin. Quedó atrás el estilo francés.

Llegar aquí, por alguien que puso PUTOS CAMAREROS en el buscador. Inquientante, irritante, desquiciante: aspirante. Porque vuelvo de un paseo como aspirante a camarera. Ya no es el juego de con 17 años, ni el favor al amigo encargado repartiendo flyers mientras paso toda la noche de marcha en su local; ahora es una oportunidad.

Y si no es el miedo, ¿cómo lo arreglas?

El 23 de abril de 1994 pisé flores, olor apestoso, miré el suelo y tuve que correr para vomitar letras. Nubes blancas, flor violeta. /Al fondo, montaña gris. Etcétera. 

El jardín sucio: limpiar, desbrozar y expulsar

Ha pasado una eternidad mezclada con páginas de gurús (nuevos y antiguos) en esto de la motivación, el pensamiento positivo, el pensamiento negativo, lenguaje no verbal y artes varias. Una frenética carrera por entender qué hago mal, qué se puede cambiar, o cómo no derrumbarse antes de llegar al objetivo.

Los micrófonos

Transformar el poema Líneas en algo con música es una experiencia surrealista. O de cómo un texto enfurruñado y poco alegre se transforma en... en esto:





 Seguiré probando el micrófono.