El dibujo, realizado sin prestar interés a la calidad artística, da un poco de miedo. No es que la foto sea muy mala, es que además el resultado es así de feo.
Uno de esos rostros estándar que pinto cuando me aburro o hablo mucho rato por teléfono o sólo quiero practicar con el trazado de caras.
Uno de esos rostros estándar que pinto cuando me aburro o hablo mucho rato por teléfono o sólo quiero practicar con el trazado de caras.