Desarrollo un estudio de campo en el que recopilaré datos durante la jornada de 8 horas, con papel y bolígrafo negro, para su posterior análisis. Se procederá a un registro cuantitativo no sólo de los productos de mi marca, sino también de cualquier otro artefacto por el que se decantan los clientes (indecisos, sólo miraban, no sabían cuál llevarse o si llevar alguno) gracias al gasto de saliva consciente, esto es, charla informativa de entre 10-20 minutos. Ampliable a una interacción de 30 minutos, en la que se incluye el desplazamiento hasta la pantalla del ordenador, consulta del stock, ir al almacén planta primera o sótano para encontrar la caja del producto y llevársela a quien la solicitaba.