Infinite

Le fou



Hablar de libros de otros, tan seguido, me deja un poco loca.

La producción se ha estancado de manera terrible, por una pérdida de interés impuesto desde fuera. Cada día llegan nuevas malas noticias, un nuevo autor que explica lo mismo y se adelanta. Entonces claro, surge la pregunta: ¿para qué? 


Existen varias herramientas del demonio informáticas que te avisan para que escribas un determinado número de palabras al día, sin falta. Bloquean el ordenador, te acorralan en el móvil peor que un comercial de telefonía y acciones por el estilo. Son tan útiles como recibir un curso de astronauta, no he instalado ninguna. La pereza por escribir no viene de ahí.

Rebusco algún manual, un curso, un algo, pero no aparece la información para solventar este bloqueo. El bloqueo es que me he enganchado a una idea. Podría inventar cualquier otra; podría hacer otra novela de terror, como las pasadas; pero quiero esta idea, sí o sí.

Otros se adelantan. Aparece la prisa.

Otros se adelantan y dicen que cuentan lo mismo. Surge la pereza, porque no puedo cambiar la idea, no quiero cambiar de idea, porque es biográfica sin que se note y no hay otra cosa que quiera contar ahora.

¿Qué se hace con un bloqueo así, a ver, expertos de los cursillos literarios?

Mientras, esperan unos cuantos e-mails con recomendación y algún editor interesado en el proceso.

7 comentarios

  1. Una sugerencia: escribe todos los días 25 minutos sobre esa idea. Todos. A ver qué sale.

    PD: creo que ya está suficientemente demostrado que no soy un robot. Al menos lo podías pedir por favor.

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  2. Suelo escribir 30-40 minutos mínimo.
    Duda: ¿¿y qué pedí, que no me acuerdo??

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    1. Cada vez que uno escribe un comentario sale un mensaje que reza "demuestra que no eres un robot" y hay que escribir unos números o letras. Lo tienes configurado así.

      PD: pues yo creo que si escribes 30-40 minutos mínimo la cosa terminará saliendo.
      PD2: la verdad no sé qué consejo te voy a dar yo a ti que llevas escribiendo toda la vida sin pausa. Yo solo escribo regularmente desde hace un par de meses.

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    2. ¡Ah! Las cosas de Blogger, los comentarios están completamente abiertos, no he puesto otra opción. Se supone que lo del robot y la combinación para copiar sale cuando están moderados. Tendré que revisar por qué hace eso.

      El "bloqueo" que mal-explico aquí no es que no salga, o que no le dedique tiempo, sino que me he enganchado a una historia (la idea) que ya está completa (sólo pasarla al papel) pero las ganas van y vienen, cuando veo que otros tantos hablan de la misma historia en textos YA publicados. Y el mío todavía se "está haciendo" para intentar que sea publicado.

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  3. Yo creo que un escritor no debería depender de las ganas y las desganas. No soy escritor, pero he leído mucho sobre procesos creativos. Los escritores desarrollan todo tipo de artimañas para estar por encima de la inspiración (y la desesperación) y siempre la esperan trabajando.
    Una vez más, todo esto ya lo sabes. Es un poco hablar por hablar.

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    1. Este caso es muy distinto. Es otro texto más, otro libro más, pero con el planteamiento de que sea "libro". Es decir, intentar por primera vez que se publique en serio.

      Con ese factor externo nunca he lidiado. Ni con el factor del actual panorama (cibernético). Desalienta ver que ideas parecidas acaban de publicarse.

      Si fuera escritora "de oficio" no existirían estas dudas primerizas. "de oficio" me refiero a la certeza de escribir para publicar, como todos los autores.

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  4. Tengo la sensación de que es casi imposible que no haya ideas parecidas a lo que a uno se le ocurre. Así que no te desalientes.
    Ya eres escritora. Nada de dudas. Escritor es el que escribe.

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